El efecto Zeigarnik en psicología

 El efecto Zeigarnik en psicología

Thomas Sullivan

El efecto Zeigarnik afirma que tenemos tendencia a recordar las tareas inacabadas. Debe su nombre al psicólogo Bluma Zeigarnik, quien, a finales de los años 20, descubrió que los camareros tenían tendencia a recordar los pedidos no servidos.

También observó que, en cuanto servían los pedidos, los camareros parecían olvidarse por completo de ellos.

La tarea que no has terminado seguirá generando pensamientos intrusivos en tu mente hasta que la termines. Una vez que la "termines", el efecto Zeigarnik para esa tarea desaparecerá.

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Cuando empiezas algo y lo dejas inacabado, experimentas una especie de disonancia. Tu mente sigue recordándote ese asunto inacabado hasta que te ocupas de él de alguna manera o lo terminas, alcanzando así cierto grado de estabilidad.

Estrés, multitarea y efecto Zeigarnik

El estrés suele ser el resultado de una sobreestimulación que sobrecarga la mente con demasiados pensamientos de los que puede manejar al mismo tiempo. Cuando se realizan varias tareas a la vez, la mente se dedica a una serie de actividades diferentes, lo que aumenta la carga sobre la capacidad de procesamiento de la mente y provoca estrés.

El efecto Zeigarnik también puede provocar estrés, porque si tienes demasiadas tareas pendientes en tu lista mental de cosas por hacer, tiendes a agobiarte con ellas y te cuesta concentrarte en la tarea que tienes entre manos.

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La mejor forma de prevenir este tipo de estrés es convertir tu lista "mental" de tareas pendientes en "física", anotándola en un papel o en tu teléfono u otro dispositivo.

Lo que esto hace es liberar tu ancho de banda cognitivo de los pensamientos intrusivos producidos por el efecto Zeigarnik para que puedas dedicar más capacidad de procesamiento mental a la tarea que tienes entre manos.

Cuando anotas algo en tu lista de tareas pendientes, tu mente se convence de que la tarea se hará tarde o temprano y, por lo tanto, ya no siente la necesidad de bombardearte con pensamientos intrusivos relacionados con esa tarea.

La expectativa de recompensa rige sus acciones

Lo único que puede hacer el efecto Zeigarnik es recordarle las tareas pendientes, pero no puede obligarle a terminarlas. Pensar en hacer una tarea y ponerse manos a la obra son dos cosas distintas, aunque la primera siempre precede a la segunda. Hay otro factor implicado: la expectativa de recompensa.

Supongamos que tiene dos tareas pendientes en la cabeza: leer un libro y ver una película. El efecto Zeigarnik le recordará ambas tareas de vez en cuando, pero la tarea que termine dependerá de la que considere más gratificante.

Para la mayoría de nosotros, ver una película es mucho más gratificante y placentero que leer un libro, por lo que es probable que procrastinemos esto último.

Deshacerse de los gusanos del oído

Un ejemplo muy común del efecto Zeigarnik es el fenómeno de las canciones que se te quedan grabadas en la cabeza: escuchas una canción, la recuerdas de forma incompleta y luego te pones a reproducir la parte que recuerdas una y otra vez.

Lo último que querría es que se le metiera en la cabeza la novena sinfonía de Beethoven. Si no entiendes de lo que hablo, te sugiero que veas La naranja mecánica.

Esto ocurre porque tu recuerdo de esa canción aún está incompleto. Sólo recuerdas partes de ella o no entiendes del todo su letra o melodía. Así que la mente sigue tocando la canción, una y otra vez, con la esperanza de completarla con cada nuevo intento. Pero eso no puede ocurrir, ya que tu recuerdo de la canción está incompleto.

Cuando tu mente sigue reproduciendo la canción, una y otra vez, en realidad es el efecto Zeigarnik el que te pide que vuelvas a oír la canción para que tu mente salga de su delirio.

Si vuelves a escuchar la canción varias veces de principio a fin, se fijará en tu memoria de forma coherente y te habrás librado del gusanillo del oído.

Thomas Sullivan

Jeremy Cruz es un psicólogo experimentado y autor dedicado a desentrañar las complejidades de la mente humana. Jeremy, apasionado por comprender las complejidades del comportamiento humano, ha estado involucrado activamente en la investigación y la práctica durante más de una década. Tiene un doctorado. en Psicología de una institución de renombre, donde se especializó en psicología cognitiva y neuropsicología.A través de su extensa investigación, Jeremy ha desarrollado una visión profunda de varios fenómenos psicológicos, incluidos la memoria, la percepción y los procesos de toma de decisiones. Su experiencia también se extiende al campo de la psicopatología, centrándose en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos de salud mental.La pasión de Jeremy por compartir conocimientos lo llevó a establecer su blog, Comprender la mente humana. Al curar una amplia gama de recursos de psicología, su objetivo es brindar a los lectores información valiosa sobre las complejidades y los matices del comportamiento humano. Desde artículos que invitan a la reflexión hasta consejos prácticos, Jeremy ofrece una plataforma integral para cualquiera que busque mejorar su comprensión de la mente humana.Además de su blog, Jeremy también dedica su tiempo a la enseñanza de la psicología en una destacada universidad, nutriendo las mentes de los aspirantes a psicólogos e investigadores. Su atractivo estilo de enseñanza y su auténtico deseo de inspirar a otros lo convierten en un profesor muy respetado y solicitado en el campo.Las contribuciones de Jeremy al mundo de la psicología se extienden más allá de la academia. Ha publicado numerosos artículos de investigación en prestigiosas revistas, ha presentado sus hallazgos en conferencias internacionales y ha contribuido al desarrollo de la disciplina. Con su gran dedicación para avanzar en nuestra comprensión de la mente humana, Jeremy Cruz continúa inspirando y educando a lectores, aspirantes a psicólogos y colegas investigadores en su viaje para desentrañar las complejidades de la mente.