Cómo tratar con personas rígidas (7 consejos eficaces)

 Cómo tratar con personas rígidas (7 consejos eficaces)

Thomas Sullivan

Las personas rígidas son las que tienen pensamientos y patrones de conducta inflexibles. Ser rígido en el pensamiento es lo contrario de ser abierto de mente.

Las personas rígidas se resisten a nuevas ideas, formas de ser y formas de comportarse. Como resultado, aprenden poco y crecen poco. Tienen una mentalidad fija frente a una mentalidad de crecimiento.

Las personas pueden ser rígidas porque forma parte de su personalidad o pueden ser rígidas en algunas áreas de la vida mientras que son más flexibles en otras. En este artículo, analizamos las causas de la rigidez en las personas y cómo tratar con personas rígidas.

¿Qué causa la rigidez?

Las personas pueden tener pensamientos rígidos y mostrar comportamientos rígidos por varias razones. En general, las personas son rígidas porque ser rígidas les sirve de alguna manera. Las razones más comunes para ser inflexible son:

1. Falta de convicción

Las personas se aferran a lo que saben o a su forma de comportarse cuando no están convencidas de que el cambio pueda ayudarles. Esto suena obvio, pero es un recordatorio útil de que quizá nos precipitamos al etiquetar a alguien como rígido.

Primero debemos mirarnos a nosotros mismos y asegurarnos nosotros están haciendo un buen trabajo intentando convencerles de que cambien de actitud.

Es fácil tachar a los demás de rígidos cuando en realidad somos nosotros los que carecemos de capacidad de convicción. Si vas a venderle una idea nueva a alguien, primero tienes que hacer tus propios deberes. Tienes que subir el nivel de tu capacidad de convicción.

2. Proteger las creencias y los hábitos

El ser humano es un animal de costumbres. Una vez que se forma una creencia o desarrolla un hábito, se deja llevar por él. Se siente cómodo con sus pensamientos y hábitos, se siente seguro en esos patrones familiares.

Una idea nueva se siente insegura, desconocida e incómoda. A través del sesgo de confirmación, las personas mantienen sus ideas existentes y rechazan las nuevas, especialmente las opuestas. A través de la disonancia cognitiva, intentan resolver la incomodidad causada por las nuevas ideas.

3. Necesidad de cierre

Esto está estrechamente relacionado con la razón anterior. La gente tiene una fuerte necesidad de cierre, es decir, quieren que las cosas se resuelvan lo antes posible. Odian la ambigüedad, quieren aferrarse a sus ideas "establecidas" sobre algo.

No quieren reabrir el cuestionamiento y el debate. Tener que reconsiderar las cosas requiere una energía mental considerable y mucha gente es demasiado perezosa cognitivamente para gastar esa energía.

La necesidad de cierre suele conducir a una resolución ineficaz de los problemas y a sacar conclusiones precipitadas. Las personas de mentalidad cerrada tienen una necesidad especialmente poderosa de cierre. No quieren volver a abrir viejos archivos en el armario de su mente, aunque tengan una buena razón para hacerlo.

4. Necesidad de control

Cuando creemos que hemos descifrado aspectos del mundo (que lo hemos cerrado), nos sentimos en control. Admitir que nuestros conocimientos pueden ser insuficientes devuelve las cosas al caos. Quienes evolucionan constantemente pasan por periodos de orden y caos.

Las personas rígidas quieren aferrarse a su orden y temen el caos, incluso si ese caos tiene el potencial de traer un orden futuro mejor.

Los fanáticos del control y los que padecen síntomas de TOC son especialmente propensos a temer perder el control y están obsesivamente apegados a sus pensamientos y patrones de conducta.

5. Evitar el dolor

Una razón importante por la que las personas están rígidamente apegadas a sus creencias e ideas es que se identifican con ellas. Como consecuencia, perder sus creencias significa perder su identidad. Una crisis de identidad no es una experiencia agradable de atravesar.

Cuando las personas se identifican con sus creencias, obtienen orgullo de ellas. Perder estas creencias no sólo significa perder su identidad, sino también importantes fuentes de orgullo y gratificación del ego.

Todo esto, combinado con el miedo a equivocarse o parecer estúpido, hace que la gente se aferre rígidamente a sus ideas. Admitir que uno se equivoca es doloroso, sobre todo para quienes se identifican con sus ideas. Tienen una inversión emocional en sus ideas.

Cómo tratar con personas rígidas

Hacer cambiar de opinión a una persona rígida no es tarea fácil. A veces puede requerir mucho tiempo y energía. Por eso, antes de decidirte a tratar con una persona rígida, asegúrate de que hacerlo va a merecer la pena. De lo contrario, déjalo correr. En la mayoría de los casos, simplemente no merece la pena.

Aun así, estas son las estrategias que puedes utilizar para que la gente sea menos rígida:

  1. Exprese sus ideas de forma clara y convincente
  2. Hágales partícipes de su idea
  3. Enmarque su idea como una posibilidad
  4. Utilizar la autoridad y la prueba social
  5. Comunique su idea de forma asertiva
  6. Enséñales el espejo
  7. Agresión

1. Expresar sus ideas de forma clara y convincente

Las ideas vagas y mal expresadas no pueden hacer cambiar de opinión a la gente. Una idea bien expresada se registra bien en la mente de la otra persona. Cuando eso ocurre, puede que no se resistan tanto porque tiene sentido para ellos.

Ver también: 4 razones de la homofobia

También puedes exponer tus ideas repetidamente para que resulten familiares a la persona a la que te diriges. Una vez que la familiaridad se instala, también lo hace la comodidad. Ahora, la nueva idea no es ese demonio desconocido que tienen que destruir inmediatamente. Pueden darle una oportunidad.

2. Hazles partícipes de tu idea

Otro truco consiste en hacerles partícipes de tu idea. La principal razón por la que se oponen a la idea puede ser porque es su En lugar de presentar la idea como una idea tuya, llévalos a ella. Hazles creer que han participado en la idea.

Por ejemplo, en lugar de decir algo como "Sugiero que contratemos un equipo de ventas" a tu rígido jefe, puedes decir:

"Nuestras cifras de ventas pueden mejorar".

El jefe probablemente te preguntará cómo. Entonces puedes sugerir la contratación de un equipo de ventas.

Tu idea puede haber sido brillante, pero enmarcarla como una idea tuya puede haber provocado resistencia. Al implicar a tu jefe en la idea, disminuyes las posibilidades de resistencia. Sienten que te han ayudado a dar con la idea y es difícil resistirse a las ideas propias.

3. Enmarca tu idea como una posibilidad

Las personas rígidas están seguras de sus propias ideas. Cuando tú también estás seguro de tus ideas, también te vuelves rígido. Cuando las ideas rígidas chocan, crean mucha fricción.

Hay que estar seguro de la idea, por supuesto, pero a veces hay que comunicarla con suavidad para reducir las fricciones.

Una forma de hacerlo es hablar de tu idea como una posibilidad. De nuevo, te alejas de tu idea de tal forma que ya no es tu idea sino una posibilidad racional.

Por ejemplo, cuando una persona rígida dice algo con lo que no estás de acuerdo, puedes decir:

"Creo que también es posible que [exponga su idea]".

"¿No cree que es posible que [exponga su idea]?".

Cuando la gente lucha contra tus ideas, a menudo están luchando contra ti. Cuando te apartas de tu idea, disminuyes la resistencia porque es patético luchar contra una mera idea, una posibilidad.

4. Utilizar la autoridad y la prueba social

La autoridad y la prueba social son poderosas herramientas de convencimiento. Los profesionales del marketing las utilizan todo el tiempo. Busque personas a las que su público objetivo respete e intente convencerlas a ellas. Tendemos a estar de acuerdo con aquellos a los que admiramos y respetamos.

Por ejemplo, si toda la oficina está de acuerdo con tu idea excepto tu jefe, tu jefe parecerá poco razonable por ser tan rígido.

5. Comunica tu idea de forma asertiva

La asertividad es una importante habilidad comunicativa. Cuando veas que alguien está siendo demasiado rígido y terco con sus formas, puedes hacer una de las siguientes cosas dependiendo de la situación: (ver Asertividad vs Agresión para más detalles)

  • Ser pasivo (no hacer nada)

Aunque a veces puede ser la mejor estrategia, a menudo cuando no se hace nada, nada cambia.

  • Sé agresivo

Si criticas su idea o la impones agresivamente, te encontrarás con resistencia. Esta estrategia rara vez funciona y suele desembocar en una lucha de poder que agria la relación.

  • Sea asertivo

Es el punto dulce entre la pasividad y la agresividad. Comunicas tu idea o desacuerdo sin un matiz de agresividad. Cuando no hay agresividad, la otra persona no tiene motivos para defenderse. Cuando no tiene motivos para defenderse, es menos probable que se resista a tu idea.

Las ideas comunicadas con asertividad se asientan en sus mentes al no encontrar resistencia. Si sigues comunicando tus ideas con asertividad, cobrarán impulso propio en la mente de tu interlocutor, que, al no tener motivos para defenderse, se verá obligado a considerarlas.

6. Enséñales el espejo

Ésta es más probable que funcione con personas inteligentes y autorreflexivas. Básicamente, señalas los fallos de su lógica y expones sus prejuicios. Apelas a su racionalidad.

De esta forma, no estás atacando su idea, su tan preciada idea, sino que estás criticando la camino han razonado para llegar a esa idea.

Cuando criticas directamente la idea de alguien, estás comunicando:

Ver también: 4 Principales estrategias de resolución de problemas

"Tu idea es una mierda. Por lo tanto, eres una mierda".

Cuando criticas su razonamiento, estás comunicando:

"La forma en que has razonado es una mierda. Puedes hacerlo mejor. Puedes ser más racional".

La clave es no hacerles parecer estúpidos por ser irracionales. No utilices insultos ni etiquetas.

Para obligarles a la autorreflexión, también puedes preguntarles algo como:

"¿Por qué eres tan rígido?"

7. Agresión

Las circunstancias extremas exigen a veces medidas extremas. La agresividad, por ejemplo, puede ser a veces eficaz para romper la rigidez de las personas.

Atención: es una estrategia arriesgada que puede que sólo funcione con personas de mente abierta que se muestren inusualmente rígidas. Saben manejar bien las críticas.

Básicamente, insultas o te burlas de sus ideas. Incluso puedes mostrarte enfadado y gritarles si quieres. También puedes utilizar la sátira y el sarcasmo mordaz.

Esta estrategia de agresión extrema tiene como objetivo conmocionar y desarmar por completo a la otra persona. La agresión moderada se enfrenta a la agresión moderada, pero pocos pueden soportar la agresión extrema.

No pueden defenderse porque el ataque es muy fuerte.

Thomas Sullivan

Jeremy Cruz es un psicólogo experimentado y autor dedicado a desentrañar las complejidades de la mente humana. Jeremy, apasionado por comprender las complejidades del comportamiento humano, ha estado involucrado activamente en la investigación y la práctica durante más de una década. Tiene un doctorado. en Psicología de una institución de renombre, donde se especializó en psicología cognitiva y neuropsicología.A través de su extensa investigación, Jeremy ha desarrollado una visión profunda de varios fenómenos psicológicos, incluidos la memoria, la percepción y los procesos de toma de decisiones. Su experiencia también se extiende al campo de la psicopatología, centrándose en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos de salud mental.La pasión de Jeremy por compartir conocimientos lo llevó a establecer su blog, Comprender la mente humana. Al curar una amplia gama de recursos de psicología, su objetivo es brindar a los lectores información valiosa sobre las complejidades y los matices del comportamiento humano. Desde artículos que invitan a la reflexión hasta consejos prácticos, Jeremy ofrece una plataforma integral para cualquiera que busque mejorar su comprensión de la mente humana.Además de su blog, Jeremy también dedica su tiempo a la enseñanza de la psicología en una destacada universidad, nutriendo las mentes de los aspirantes a psicólogos e investigadores. Su atractivo estilo de enseñanza y su auténtico deseo de inspirar a otros lo convierten en un profesor muy respetado y solicitado en el campo.Las contribuciones de Jeremy al mundo de la psicología se extienden más allá de la academia. Ha publicado numerosos artículos de investigación en prestigiosas revistas, ha presentado sus hallazgos en conferencias internacionales y ha contribuido al desarrollo de la disciplina. Con su gran dedicación para avanzar en nuestra comprensión de la mente humana, Jeremy Cruz continúa inspirando y educando a lectores, aspirantes a psicólogos y colegas investigadores en su viaje para desentrañar las complejidades de la mente.