16 Signos de baja inteligencia

 16 Signos de baja inteligencia

Thomas Sullivan

No sé a ti, pero a mí me gusta pasar tiempo con gente más inteligente que yo. Para ello, tengo que escudriñar activamente mi círculo social en busca de personas poco inteligentes y limitar mi asociación con ellas.

Así que pensé que un artículo que enumere los principales signos de baja inteligencia sería una buena idea. Tenga en cuenta que cuando me refiero a baja inteligencia, no estoy hablando de personas con discapacidades de aprendizaje o intelectuales que se diagnostican en la infancia.

Además, no estoy hablando de puntuaciones bajas de CI. No me importan mucho las puntuaciones de CI. Nunca he hecho una y nunca la haré.

Estos signos de baja inteligencia por los que vas a pasar están presentes en adultos sanos que funcionan con normalidad. Empecemos.

1. Falta de curiosidad

El sello distintivo de la baja inteligencia, la falta de curiosidad mantiene a las personas estancadas en su nivel actual de conocimientos. Saben lo justo para desenvolverse en el mundo, no se hacen preguntas y parecen estar satisfechas con el lugar en el que se encuentran intelectualmente.

2. Falta de humildad intelectual

La humildad intelectual significa aceptar que no sabes lo que no sabes. La curiosidad y la humildad intelectual son los motores del crecimiento intelectual. La tendencia de las personas es creer que lo saben todo. Sin embargo, cuanto más sabes, más te das cuenta de lo poco que sabes.

3. Cerrazón

Estar cerrado a nuevas ideas, opiniones e información mantiene a las personas poco inteligentes estancadas donde están. Las personas de mentalidad cerrada tienen tendencia a confirmar sus creencias preexistentes, por lo que no pueden aprender cosas nuevas.

4. No le interesa aprender

La mayoría de las personas poco inteligentes consideran que aprender es una pérdida de tiempo. Ni siquiera tienen la inteligencia suficiente para ver en qué les puede beneficiar aprender. Dejan de aprender cuando se gradúan. Las personas muy inteligentes, en cambio, aceptan que aprender es un proceso que dura toda la vida.

5. No buscar la novedad

Las personas de inteligencia baja parecen tener aversión a la novedad en general. Verá que no sólo evitan exponerse a nuevas ideas, sino a cualquier cosa nueva: arte nuevo, música nueva, etc. Por el contrario, la novedad es muy estimulante para las personas de inteligencia alta. Buscan la novedad para seguir ampliando su mente y ver las cosas bajo una luz nueva.

6. Evitar pensar

Las personas poco inteligentes evitan pensar siempre que pueden. Siempre necesitan que se les diga exactamente lo que tienen que hacer y no utilizan su propia mente. Prosperan en estructuras de educación formal que requieren un aprendizaje memorístico, pero carecen de astucia en la calle. Póngalas en una situación novedosa en la que tengan que pensar por sí mismas y verá cómo se desmoronan.

7. Disminución de la capacidad de reflexión

La capacidad de reflexionar sobre las cosas es una de las mayores habilidades cognitivas del ser humano. Nos ayuda a comprender la causalidad de los acontecimientos. La observación aguda y la capacidad de reflexionar han sido los motores del progreso humano.

8. Falta de pensamiento crítico

El pensamiento crítico es difícil porque va en contra de cómo funciona la mente. La mente asimila la información como creencias y luego se dedica a confirmar esas creencias. Poner a prueba la validez de esas creencias consume mucha energía mental. Sin embargo, es la única manera de acercarse a la verdad.

Ver también: ¿Por qué algunas personas son tan egoístas?

9. No cambiar de opinión a menudo

El ritmo al que las personas cambian de opinión indica el ritmo al que aprenden cosas nuevas. Mientras que las personas inteligentes cambian su postura sobre las cosas de un mes a otro o de una semana a otra, las personas poco inteligentes se aferran a las cosas que aprendieron hace años.

Tener una opinión demasiado firme sobre cualquier cosa suele ser señal de que una persona sólo está viendo una parte de toda la historia.

10. Pensamiento en blanco y negro

Las personas poco inteligentes son maestras del pensamiento en blanco y negro. Sólo parecen pensar en términos de opuestos, ignorando las zonas grises intermedias. La realidad suele ser demasiado compleja para interpretarla en términos de opuestos.

11. Falta de creatividad

Al carecer de búsqueda de novedades, las personas poco inteligentes también carecen de creatividad. La creatividad no surge del vacío. Las personas más creativas se exponen constantemente a otras personas creativas en sus campos. De este modo, la creatividad se alimenta de sí misma y produce cosas bellas en el mundo.

Ver también: Sonrisa falsa frente a sonrisa real

12. Falta de flexibilidad cognitiva

Cambiar de opinión a menudo es un signo de apertura mental. Es la opinión-flexibilidad, es decir, no ser rígido en las opiniones. Del mismo modo, la flexibilidad cognitiva significa no ser rígido en las formas de pensar. La flexibilidad cognitiva es el objetivo último de la Terapia Cognitivo-Conductual. Quienes la desarrollan pueden mejorar significativamente su salud mental.

13. Pensamiento a corto plazo

Las personas poco inteligentes son constantemente incapaces de superar su deseo de gratificación instantánea. Con frecuencia hacen la vista gorda ante las consecuencias a largo plazo de sus comportamientos actuales.

14. Mala toma de decisiones

Todos tomamos decisiones equivocadas de vez en cuando, pero las personas poco inteligentes no sopesan sistemáticamente los pros y los contras de sus decisiones.

15. Pensadores poco realistas

Cuanto más alineada está la mente de una persona con la realidad, más inteligente es. Estar fuera de contacto con la realidad es un signo seguro de poca inteligencia.

16. Escasas habilidades interpersonales

Ser capaz de tratar eficazmente con la gente también es un signo de alta inteligencia. Las personas de baja inteligencia carecen de habilidades sociales clave como:

  • Tener una mentalidad beneficiosa para todos
  • Ser empático
  • Buenas dotes de comunicación
  • Tener inteligencia emocional
  • Capacidad para hacer frente a las críticas
  • Capacidad para entender el sarcasmo
  • Capacidad para ver las cosas desde la perspectiva del otro

Thomas Sullivan

Jeremy Cruz es un psicólogo experimentado y autor dedicado a desentrañar las complejidades de la mente humana. Jeremy, apasionado por comprender las complejidades del comportamiento humano, ha estado involucrado activamente en la investigación y la práctica durante más de una década. Tiene un doctorado. en Psicología de una institución de renombre, donde se especializó en psicología cognitiva y neuropsicología.A través de su extensa investigación, Jeremy ha desarrollado una visión profunda de varios fenómenos psicológicos, incluidos la memoria, la percepción y los procesos de toma de decisiones. Su experiencia también se extiende al campo de la psicopatología, centrándose en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos de salud mental.La pasión de Jeremy por compartir conocimientos lo llevó a establecer su blog, Comprender la mente humana. Al curar una amplia gama de recursos de psicología, su objetivo es brindar a los lectores información valiosa sobre las complejidades y los matices del comportamiento humano. Desde artículos que invitan a la reflexión hasta consejos prácticos, Jeremy ofrece una plataforma integral para cualquiera que busque mejorar su comprensión de la mente humana.Además de su blog, Jeremy también dedica su tiempo a la enseñanza de la psicología en una destacada universidad, nutriendo las mentes de los aspirantes a psicólogos e investigadores. Su atractivo estilo de enseñanza y su auténtico deseo de inspirar a otros lo convierten en un profesor muy respetado y solicitado en el campo.Las contribuciones de Jeremy al mundo de la psicología se extienden más allá de la academia. Ha publicado numerosos artículos de investigación en prestigiosas revistas, ha presentado sus hallazgos en conferencias internacionales y ha contribuido al desarrollo de la disciplina. Con su gran dedicación para avanzar en nuestra comprensión de la mente humana, Jeremy Cruz continúa inspirando y educando a lectores, aspirantes a psicólogos y colegas investigadores en su viaje para desentrañar las complejidades de la mente.